Las terapias de células T con receptores quiméricos de antígenos (CAR-T) se presentan como la gran innovación de este siglo para luchar contra el cáncer. Se trata de una estrategia de inmunoterapia "que combina también la terapia génica, en la que los linfocitos, que son las células del sistema inmune del propio paciente, se modifican en el laboratorio mediante tratamientos génicos para que expresen en su superficie un marcador que va a ir dirigido como un receptor".
Noticias
EL CONFIDENCIAL: Un caballo de Troya 'made in Spain' contra el cáncer, nuevas células para atacar los tumores
- Detalles