Page 2 - Boletin SEHH Enero - Febrero 2022
P. 2

  sumario 2
           NOTICIAS
ENTREVISTAS
Hablamos con dos investigadoras becadas por la FEHH.
PACIENTES PUBLICACIONES
El presidente de la SEHH participa en Venetoclax en el tratamiento de la LMA en adultos. la IV Cumbre Española contra el Cáncer.
        La SEHH impulsa el I Curso Teórico-Práctico de Estudio Molecular en LLC.
   Editorial Noticias
• La terapia celular deslumbra en el último congreso de la Asociación Americana de Hematología
• La interpretación de las alteraciones genéticas aclara el pronóstico de la leucemia linfocítica crónica
• Las terapias dirigidas se imponen a la quimioinmunoterapia en el tratamiento de la leucemia linfocítica crónica
• Los hematólogos pondrán en marcha un programa de calidad para el mielograma
• La fragilidad del paciente debe valorarse antes de elegir cualquier tipo de inmunoterapia
• Nuevas opciones terapéuticas ofrecen esperanza a
los pacientes refractarios con leucemia mieloide crónica
• Hematólogos impulsan una publicación ‘on line’ sobre enfermedades lisosomales dirigida a la comunidad hispana
• El Examen Europeo de Hematología se celebra en Madrid el 10 de junio de 2022
• La Fundación CAT abre el proceso de selección de 10 auditores Entrevistas
• Tamara Jiménez Solas, investigadora predoctoral, Hospital Universitario de Salamanca
• María Marcos Jubilar, investigadora de la Clínica Universidad de Navarra
Reportaje
• Más de 4.200 pacientes adultos son tratados cada año con protonterapia en Europa
Hematología 2.0
• La teleconsulta en pacientes con mieloma múltiple permite realizar una atención más completa y adaptada a sus necesidades
• Nuestras redes Lo último
Pacientes
• El presidente de la SEHH critica la falta de equidad en el acceso a la innovación, en muchos casos debida a las trabas administrativas
• Carolina Darias se compromete a impulsar el Plan de Acción Europeo
• La SEHH participa en la elaboración del primer informe sobre la inequidad en cáncer en España
• Los pacientes piden un Plan Nacional de Medicina de Precisión “real””
• El ‘Proyecto Mateo’ busca una terapia con CAR-T para una grave leucemia
• Los pacientes con hemofilia reclaman a la UE simplificar el acceso a nuevos fármacos
• La Fundación Josep Carreras recauda más de 200.000 € en una campaña contra la leucemia infantil que afecta a los bebés
Premios y becas
• El Grupo Español de Eritropatología concede su beca de investigación a Paloma Ropero, del Hospital Clínico San Carlos de Madrid
• El Programa de Becas de Investigación de Gilead apoya la labor de jóvenes investigadores
Sector Publicaciones Agenda Titulares Galería
           Se trata de una enfermedad heterogénea desde el punto de vista clínico, morfológico, inmunofenotípico y genético. Esta heterogeneidad ya se manifiesta en la propia clasificación de la OMS, que, en su última versión revisada de 20184 incluye distintas entidades (Figura 1). En función de su etiología se clasifica en: (1) LMA de novo, que aparece en ausencia de factores desencadenantes; (2) LMA secundaria en pacientes con posibles desencadenantes de la enfermedad: antecedentes de otra hemopatía que predispone a LMA como los síndromes mielodisplásicos (SMD) (LMA con cambios displásicos o LMAd) o bien tratamientos con leucemógenos como determinados quimio y radioterápicos (neoplasia mieloide secundaria a tratamiento, NMRT). Desde el punto de vista clínico, los factores asociados a una mala evolución de la enfermedad son: edad superior a 60 años, LMA secundaria (LMAd y NMRT), así como determinadas alteraciones citogenéticas (p.e. cariotipo complejo) o moleculares (p.e. anomalías del gen FLT3, TP53, RUNX1 o ASXL1). (Ver tabla 1, clasificación pronostica ELN 2017)5. Tanto las LMAd como las NMRT presentan, con mayor frecuencia y complejidad, alteraciones citogenéticas y moleculares de mal pronóstico, en comparación a otros subtipos de LMA que limitan la eficacia de los tratamientos disponibles y empeoran el pronóstico de las LMA (menores respuestas, peor supervivencia).
El tratamiento de la LMA debería plantearse con intención curativa siempre que sea posible6.
La quimioterapia intensiva se divide en una fase de inducción seguida de uno o varios ciclos de consolidación. La quimioterapia se basa en la combinación de citarabina junto con una antraciclina (daunorubicina o idarubicina), que habitualmente se administra durante 7 días (citarabina) y 3 días (daunorubicina) en lo que se conoce como esquema 7+37. Dicho tratamiento comporta una toxicidad considerable y por ese motivo es impracticable en los pacientes de edad avanzada o con enfermedades asociadas relevantes. En los pacientes de alto riesgo se recomienda una consolidación final de la respuesta mediante trasplante alogénico de progenitores hematopoyéticos (aloTPH), aunque, dicho procedimiento, tampoco se puede ofrecer a aquellos pacientes de edad avanzada, enfermedades asociadas o toxicidad grave secundaria al tratamiento quimioterápico previo8.
2/9


























































   1   2   3   4   5